Continúa la Tradición del “Viborero de Pitiquito”
Con su hijo el Señor Luis Felipe Sánchez Palomares
Por Marcos Francisco López Robles / El Sol de Caborca Caborca, Sonora.
Con una Tradición ya de más de 34 años, en la estación de Gasolina Arco en la salida de Caborca hacia Sonoyta, allí se encuentra Luis Felipe Sánchez Palomares, hijo del famoso “Viborero de Pitiquito” Ramón Sánchez Raygosa, que actualmente tiene 86 años de edad, Luis Felipe es quien continua el trabajo de su Padre vendiendo aceite, polvo y víboras de cascabel secas y diferentes plantas medicinales.
Familia que es oriunda del vecino Municipio de Pitiquito, Sonora, quienes se dedican a la comercialización de víboras secas, en polvo, aceite y una variedad de plantas medicinales que se dan en el región del gran desierto de Altar.
Allí usted podrá adquirir una víbora seca, en polvo y aceite, para el tratamiento de diversos padecimientos como el dolor de oídos, muelas, purifica la sangre, acné, alergias, anemia, anginas, asma, artritis, cálculos biliares, cálculos renales, cáncer, ciática, cirrosis, cistitis, colitis, conjuntivitis, diabetes, diarreas, enfermedades venéreas, enfermedades eruptivas, hemorroides, hinchazones, impotencia sexual, leucemia, lumbago, mal del pinto, mareos, mezquinos, piorrea, quebraduras, reumas, sarna, torceduras, tumores, úlceras y varices.
Así mismo el aceite es amplia mente recomendado en especial para sobarse con el, para trastornos músculo-esqueléticos como los derivados del cansancio, dolor de espalda, huesos y piernas, lumbago, quebraduras, reumas, torceduras y otros padecimientos atribuidos a la frialdad.
Además podrá encontrar diferentes plantas con propiedades medicinales, como la Raíz de Choya, Taji de Palo Fierro, Bachata, Cosahui, Moringa, La Sinita o Musaro, estas plantas se utilizan tradicionalmente para combatir diferentes padecimientos, sus propiedades curativas son bien conocidas por los indígenas oriundos del estado de Sonora.
El “Viborero de Pitiquito” Ramón Sánchez Raygosa, ya con su edad, no pudo continuar con su trabajo, a donde llegan gentes de muchas partes de México, especialmente traileros y ciudadanos Norteamericanos, para adquirir sus productos, donde Don Ramón el “Viborero de Pitiquito”, estuvo por más de 30 años al frente del negocio, continuando hoy con esa tradición su hijo Luis Felipe Sánchez Palomares, donde se le atenderá de forma amable y allí mismo se le darán todas las instrucciones de cómo aplicar o tomar lo que se vende.