Relato de un sueño

Desde siempre se ha definido al mundo seri o comcaac “la gente” como controvertido y poco accesible para las miradas ajenas. Su historia y su tiempo cosmogónico reflejan una cultura de resistencia constante y de origen mítico muy particular.

fuente: https://www.gob.mx/

INPI | Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas | 14 de julio de 2020

Libro electrónico. "Comca'ac. Relato de un sueño". (Ficción)

Desde siempre se ha definido al mundo seri o comcaac “la gente” como controvertido y poco accesible para las miradas ajenas. Su historia y su tiempo cosmogónico reflejan una cultura de resistencia constante y de origen mítico muy particular. Persecuciones, aislamiento, marginación y discriminación son algunos elementos que ellos han sabido resistir. Acostumbrados a lo hostil e inhóspito del desierto por generaciones, han desarrollado un alto sentido de supervivencia con un alto orgullo, implícito en toda la tribu.

Los comcaac son un pueblo indígena que habita el estado de Sonora. Su territorio actual comprende principalmente las localidades de Desemboque, municipio de Pitiquito, y Punta Chueca, municipio de Hermosillo, que se encuentran a lo largo del Canal de Infiernillo. Anteriormente ocupaban la Isla Tiburón, que ahora es considerada zona de reserva de la flora y fauna silvestre del desierto. En las temporadas de pesca, los seris se trasladan a los diferentes campos pesqueros de la zona y visitan las sierras vecinas para la caza y la recolección.

La región que ocupan es sumamente árida e inhóspita. La vida de este grupo se desarrolla entre el desierto y el mar, con actividades de pesca, caza y recolección, principalmente. El origen de los seris es adjudicado por ellos a un antepasado de los pelícanos, un ave de melodioso canto que contenía una gran sabiduría. Afirman que la isla Tassne fue la primera en crearse, después la isla Tiburón y al final el resto del mundo.

Las festividades más importantes de los seris son la fiesta de la Pubertad, la fiesta de la Caguama, la fi esta de la Canasta grande o Saaptim y la fi esta de Año Nuevo Comcaac. Según la creencia de este pueblo, fue Kwikekaiikásol un ser mítico que les enseñó la realización de algunas fiestas, como las de la Pubertad y la caza de las Caguamas. En todas estas fiestas la música tiene una presencia de vital importancia.

Actualmente, en tales celebraciones, que en general no están sometidas a fechas fijas, aparecen los cantos y la danza del pascola como elementos fundamentales, así como la pintura facial y la abundancia de alimentos y juegos.

El libro  que aquí presentamos no es una obra etnográfica, ni describe las fiestas y las danzas, tampoco aborda la identidad del pueblo comcaac. Es un texto de ficción, es el relato de un sueño, que desde el inconsciente mismo habla de una cultura y de una forma de vida. Es el resultado de la interpretación del escritor Aldo Adame Pérez y de las imágenes oníricas que surgen en la imaginación de Rosa Isela Becerra Rodríguez.